En Ollé nos preocupamos por el mundo que nos rodea. Es por eso que nos animamos a mejorar nuestras instalaciones para hacerlas más respetuosas con el medioambiente a medida que la empresa evoluciona y va creciendo.
La energía solar no emite gases de efecto invernadero, por lo que no contribuye al calentamiento global. Es una de las tecnologías renovables más eficientes en la lucha contra el cambio climático. Actualmente, estamos dotando las instalaciones de Ollé con 153 placas solares y una producción anual de 103.375 kWh. De esta manera, los rayos solares que choquen contra las placas se transformaran en energía que recibiremos en electricidad durante los procesos de producción.
¿Cuáles son los efectos positivos tiene el uso de la energía solar?
Aunque esta fuente de energía suponga una inversión inicial elevada y corra el riesgo de ser dependiente del clima, presenta muchas ventajas para ambos, nuestra empresa y el medio ambiente.
- Sin emisiones contaminantes, ni directa ni indirectamente.
- Ahorro energético muy elevado a medio plazo.
- A diferencia de los generadores de energía eléctrica convencional, no genera ruido.
- Es compatible con otras clases de energía, así que permite una transición gradual.
En línea con el Objetivo 11 de la Agenda 2030
En 2015, la ONU aprobó la Agenda 2030 sobre el Desarrollo Sostenible, con el fin de que la sociedad emprenda un nuevo camino para mejorar la vida de todos. Esta, cuenta con 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible que implican varios aspectos relacionados con la ética, la salud, la igualdad y la economía mundial para la transición hacia una sociedad globalizada, más respetuosa con el medio ambiente y más igualitaria. Uno de los objetivos es el de “Lograr que las ciudades sean más inclusivas, seguras, resilientes y sostenibles”.
Con nuestras nuevas instalaciones como fuente de energía, en Arcas Ollé reducimos el impacto ambiental negativo y promocionamos el uso eficiente de los recursos naturales.